1-1. El Mirandés perdona al Córdoba en una gran segunda parte
El conjunto rojillo se repuso del gol cordobés al filo del descanso y consiguió el empate
Pudo certificar la remontada en los minutos finales, pero la fortuna no estuvo de su parte
El Mirandés desaprovechó hoy una oportunidad de oro para seguir sumando de tres en tres después de perdonar más de la cuenta ante un Córdoba que en el segundo tiempo se vio totalmente superado por los rojillos. A pesar de ello, el conjunto dirigido por Carlos Terrazas sumó otro punto que le permite mantener intactas las opciones en el tramo final de liga.
Ficha técnica
1 – Córdoba CF: Juan Carlos; Gunino, Bernardo, Raúl Bravo, Pinillos; Abel, López Garai; Pedro, López Silva (Uli Dávila, min. 81), Dani Espejo (Juanlu, min. 60); Xisco.
0 – CD Mirandés: Bernardo; Flaño, Caneda, Corral, Docal (Koikili, min. 40); Iriome, Iván Agustín, Garmendia (Igor Martínez, min. 68), Ríos; Pablo Infante y Díaz de Cerio (Goiria, min. 46).
Goles: 1-0, min. 44: Pedro; 1-1, min. 73: Goiria.
Árbitro: Gorka Sagués Oscoz (Comité Vasco), que amonestó a los locales Luso y Pinillos, así como a los visitantes Iriome, Corral y a Caneda.
Incidencias: Partido de la trigésima sexta jornada disputado en El Arcángel. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Tito Vilanova.
Llegaba el Mirandés a tierras andaluzas crecido tras vencer a Las Palmas y sumar 15 de los últimos 21 puntos en juego, pero enfrente tenía otro equipo enrachado, con tres victorias consecutivas y el play off en el punto de mira. Terrazas dio continuidad a Bernardo en la portería después de su solvente actuación el pasado fin de semana. Al margen de ese cambio, pocas modificaciones en el dibujo. Cunado las cosas funcionan, lo mejor es no tocarlas.
Empezó el partido con ambos equipos jugando de tú a tú, pero sin apenas profundidad. Mucho despliegue, pero poco fútbol. En ese escenario, los minutos iban pasando sin que apenas sucediera nada cerca de las áreas. Sólo un remate de Xisco en el minuto 18 que se fue fuera y un tímido disparo a puerta de Pablo al filo del 30 consiguieron inquietar a los porteros de ambos equipos.
A raíz de esa ocasión, el Córdoba pareció dar un paso al frente y poco a poco fue acercándose a las inmediaciones de Bernardo. Primero lo intentó Abel con un potente disparo desde fuera del área que acabó en saque de esquina, para minutos más tarde cederle el protagonismo a Pedro. El jugador cordobés aprovechó un desajuste en la posición del portero rojillo para enganchar un fantástico disparo que se coló por la escuadra al filo del descanso.
Con el 1-0 en el marcador, y tras un primer tiempo demasiado errático en la faceta ofensiva, Terrazas movió ficha, poniendo en el campo a Goiria en sustitución de Díaz de Cerio. la salida del delantero vizcaíno le dio nuevos aires al equipo mirandés, que durante el segundo tiempo fue dueño y señor del partido. Apenas cinco minutos después de reanudarse el encuentro, Iriome enganchó un impresionante disparo que se estrelló en el larguero. Era el primer aviso.
Una vez más, el equipo de Terrazas mostró su mejor versión tras la reanudación y sus acercamientos al área del Córdoba fueron una constante. Esa superioridad se certificaría con el empate. En el minuto 73, Iriome superaba a su par en la banda y ponía un buen centro dentro del área. Allí estaba Goiria, que alcanzó el balón a botepronto y batió a Juan Carlos con claridad.
Asedio
A partir de ahí, el Mirandés protagonizó un auténtico asedio. Apenas unos minutos después, el cancerbero andaluz salvaba a su equipo del 1-2 parando otro buen disparo de Goiria. También Pablo Infante lo intentó a diez minutos del final, pero Juan Carlos volvió a evitar el gol ante la desesperación rojilla. Una desesperación que se incrementaría en el 87 cuando Igor Martínez estrellaba otro balón en el palo tras una gran jugada.
A pesar de la superioridad mostrada en el segundo tiempo, la fortuna no se alió con el Mirandés, que sumó un punto que, aunque pueda saber a poco, supone un pasito más de cara a asegurar la permanencia cuanto antes y poder pensar en objetivos más ambiciosos.