28-22. Un paso en firme para la permanencia
El Villa de Aranda vence con comodidad al Bidasoa Irún y escapa del descenso
Los ribereños se aprovechan del pinchazo de Cuatro Rayas
Buen partido de los arandinos. I.Saeta/burgosdeporte
Jornada perfecta. El Villa de Aranda salió hoy de los puestos de descenso tras vencer con comodidad al Bidasoa Irún y aprovechar el pinchazo del Cuatro Rayas. Después de varias semanas en el pozo, el conjunto dirigido por Jacobo Cuétara vuelve a respirar y afronta el tramo final de la liga con más garantías que sus rivales directos.
Ficha Técnica
28 – Villa de Aranda Top Ribera (14+14): Xavi Díaz (Amérigo, ps), Cabanas (2, 1p), Emilio Esteban (1), Diego Camino (2, 1p), Markel Beltza (1) Oswaldo Maestro (6), Mikel Redondo (-) -siete inicial-; Doldán (5), Juli(1), Sladic (3), Javi Muñoz (4), Bicho (1), Chema (-), Moyano (2), Miguelón (-).
22 – Bidasopa Irún (8+14): Zubiria (Otegui, ps), Ugarte (-), Díaz de Cerio (5), Aramburu (2), Mugica (1), Azkue (5, 3p), Roberto Álvarez (-) -siete inicial-; Crowley (4), Aldunate (2), Kallman (3), Agustín vidal (-).
Parciales: 3-1, 6-2, 8-2, 10-6, 12-7, 14-8 (descanso); 15-10, 17-11, 19-13, 22-16, 26-18, 28-22 (final del partido).
Árbitros: San José Muro (Madrid) y Rodríguez Murcia (Comunidad Valenciana), expulsaron a los jugadores locales Markel Beltza y Álvaro Cabanas. También excluyeron dos minutos a Markel Beltza, Rasero, Sladic (2) y Mikel Redondo por el Villa de Aranda y a Kallman, Ugarte (2), Aldunate (2) y Vidal por el Bidasoa Irún.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo quinta jornada de la Liga Asobal disputado en el pabellón Príncipe de Asturias ante unos 2.000 espectadores.
Conocida ya la derrota del Cuatro Rayas, los arandinos tenían en su mano abandonar los puestos de descenso con una victoria frente al farolillo rojo. Así, los hombres de Cuétara saltaron a la pista más concentrados que el conjunto guipuzcoano. Con una defensa muy sólida y buenas variantes ofensivas, el equipo burgalés se puso rápidamente por delante en el marcador. Un primer parcial de 3-0 abrió el camino de la victoria ante un Bidasoa que tardó demasiado en encontrar su lugar en la pista y siempre fue a remolque en el marcador.
No fue hasta el minuto 4 cuando el conjunto irundarra inauguró el electrónico, pero la escasa efectividad goleadora siguió siendo una losa durante buena parte del primer tiempo. La férrea defensa 6-0 del Villa de Aranda impedía los lanzamientos cómodos de los visitantes, que cuando lograban superar el entramado amarillo se topaban con un soberbio Xavi Díaz. El portero gallego volvió a dar una exhibición bajo los palos e impidió cualquier atisbo de remontada visitante.
En esa situación, el Villa de Aranda fue despegándose en el marcador poco a poco hasta alcanzar una ventaja de 6 goles mediada la primera parte (8-2), momento en el que el Bidasoa pareció despertar de su letargo. La salida a pista de Kallman dio nuevos aires al conjunto guipuzcoano, que en apenas cinco minutos recortó la diferencia a 3 goles (10-7).
Sin embargo, los ribereños volvieron a mostrar su mejor versión en los últimos minutos de la primera parte, atando en corto al jugador sueco y anulando la capacidad ofensiva de los irundarras para irse al descanso con seis goles de ventaja (14-8).
Tras el paso por vestuarios, el Bidasoa saltó más concentrado al sintético del Príncipe de Asturias y recortó diferencias con dos rápidos contraataques, pero el Villa de Aranda volvió a responder para recuperar de nuevo su máxima ventaja. El 18-11 que reflejaba el luminoso en el minuto 40 empezaba a antojarse decisivo.
Dos expulsiones
Aún así, el partido todavía depararía varias sorpresas de mal gusto para el cuadro local. COn apenas diez minutos de diferencia, los árbitros expulsaron a Markel Beltza y Álvaro Cabanas por sendas jugadas muy protestadas por la grada.
Sin dos de sus jugadores clave, el Villa de Aranda afrontó los últimos minutos mermado, pero eso no le impidió mantener e incluso incrementar su ventaja. Un gol desde el pivote de Juli en el minuto 55 terminó de sentenciar un partido cuyo resultado fue maquillado por el Bidasoa en el último parcial.