Un veterinario y tres ganaderos, imputados por falsificación

El Seprona destapa una trama que, desde 2012, falsificaba en Burgos  datos de caballos para su posterior venta

Los imputados utilizaban la documentación de otras explotaciones para legalizar los animales, algunos de procedencia desconocida

El veterinario es de Asturias y los ganaderos de Cantabria y Burgos

Un veterinario y tres ganaderos, imputados por falsificación Agente del Seprona con lector de microchip. BC

El Seprona de la Guardia Civil ha imputado a un veterinario y a tres ganaderos por un delito de falsedad en documento público al utilizar los datos de titulares de otras explotaciones ganaderas, así como sus CEA’s (Código de Explotación Agraria), para documentar a caballos propios o de procedencia desconocida. Según informan desde el Instituto Armado, la investigación se inició a raíz de unas supuestas irregularidades en la identificación de ganado  caballar destinado a la venta para su sacrificio.

Veterinarios oficiales de la Junta de Castilla y León en la provincia de Burgos fueron los que detectaron dichas irregularidades, mientas que el Equipo de Investigación del SEPRONA de Burgos (EPRONA), tras la investigación pertinente, consiguió destapar una complicada trama, que se remontaba al 2012. El estudio de la documentación aportada en cada caso, microchips, pasaportes y documentación de transporte, ha permitido imputar a un veterinario colegiado en Asturias y a tres ganaderos, uno de Burgos y dos de Cantabria.

Datos procedentes de otras explotaciones

El profesional, valiéndose de su posición utilizaba documentos de solicitud de identificación de ganado para dotar de identidad a caballos propiedad de los ganaderos implicados. Para ello aportaba datos de terceros ganaderos sin su consentimiento e incluso el CEA de la explotación para legalizar el ganado, falsificando firmas con la intención final de facilitar su transporte hasta un matadero o para su venta a terceros, con el consiguiente beneficio.

Los tres ganaderos han sido identificados e imputados en los hechos, al verificarse que se beneficiaban de estas falsificaciones. Legalizaban animales, a veces propios y en otras ocasiones de procedencia desconocida, utilizando los pasaportes facilitados. También colocaban transpondedores o microchips identificativos en ejemplares equinos que no se correspondían con las características ni con la propiedad que figuraban en los mismos. En total, se han detectado 211 caballos con identificación falsa.

Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción Nº 1 de Miranda de Ebro.