El II Congreso sobre la Vespa Velutina acerca experiencias de Galicia, Baleares o Asturias

Villarcayo acogerá este año la iniciativa, que se ha convertido en una experiencia prácticamente única en el panorama nacional

Se contará con ponentes de País Vasco, Galicia, Asturias, Baleares, Italia o Francia para abordar lucha e investigación

Roberto Puch insiste en que falta coordinación y recuerda que la avispa asiática está ya en seis comarcas de Burgos

El II Congreso sobre la Vespa Velutina acerca experiencias de Galicia, Baleares o Asturias La retirada de nidos es una acción complicada con diferentes protocolos. BC

Las experiencias en la lucha contra la Vespa Velutina, conocida popularmente como avispa asiática, y proyectos de investigación científica de Baleares, Asturias, Galicia y País Vasco llegan a Burgos. Expertos, profesionales y apicultores se dan cita los días 27 y 28 de octubre en el II Congreso Nacional sobre la Vespa Velutina, que se celebrará en Villarcayo. Tras la experiencia del pasado año, exitosa, la Asociación Vespa Velutina ha ampliado la programación, convirtiendo el congreso en una cita nacional prácticamente única en su especie.

Los protocolos de actuación ante la presencia de avispa asiática, los métodos de control de las poblaciones, la neutralización de ni dos, los mecanismos de control en zonas urbanas o los programas de investigación científica serán algunos de los temas que se abordarán durante el congreso, al que están invitados apicultores, biólogos, agentes medioambientales, bomberos, veterinarios, alcaldes y todas aquellas personas en contacto directo con la Velutina, o interesadas en esta agresiva especie que parece que ha venido para quedarse.

Las heladas de primavera helaron muchos nidos pero la plaga sigue siendo una amenaza

Roberto Puch, de la Asociación Vespa Velutina, asegura que el problema sigue ahí a pesar de que este año se haya hablado menos sobre la avispa asiática. Las heladas de primavera paralizaron la plaga, pues helaron muchos nidos. De hecho, se esperaba la proliferación de hasta 1.000 avispas en Las Merindades, ya que el invierno fue suave y favoreció la cría, pero las heladas lo abortaron. Eso no quiere decir que se haya acabado con la Velutina, ha insistido Puch, pues “es cuestión de tiempo que la plaga se extienda por toda Castilla y León”.

En Burgos entró en 2014 y ahora mismo hay seis comarcas que ya cuentan con ejemplares de la Velutina. La última en incorporarse ha sido Odra-Pisuerga, ya que a principios de octubre se detectó un nido en Melgar de Fernamental. Puch reconoce que no es extraño encontrarse Vespa en esta zona, habida cuenta de el año pasado ya se detectó en Herrera de Pisuerga, en Palencia, localidad muy próxima a Melgar. “Ya no es un problema solo de Las Merindades”, ha insistido Roberto Puch, y no tardando lo será de toda la región.

Territorios comprometidos

Sin embargo, en Castilla y León parecen no habérselo tomado tan en serio como en otras comunidades autónomas. Por ese motivo, el congreso nacional trae las experiencias de Baleares, única región que de verdad se ha puesto las pilas, ha apuntado el portavoz de la asociación. Contarán con Víctor Colomar, técnico del COFIB, el centro de rescate de animales salvajes, y con Mar Leza, de la universidad de Las Baleares, quienes hablarán sobre planes de actuación y proyectos de investigación.

Cada comarca y cada municipio actúa a su modo frente a la Vespa Velutina

Del mismo modo, Luis Laria, presidente de CEPESMA (Coordinadora para el estudio y la protección de especies marinas), hablará sobre lucha e investigación en Asturias, y lo mismo hará Alberto López, de la Asociación Gallega de Apicultura, sobre las prácticas en Galicia. Además, visitarán el congreso la italiana Daniela Laurino y la francesa Karine Monceau. Las ponencias se completarán con técnicos y bomberos de Castilla y León y el País Vasco, y expertos de diferentes empresas.

Roberto Puch insiste en la falta de control y coordinación que existe en Castilla y León, y en Burgos, para la lucha contra la Vespa Velutina. La Junta sacó el pasado año un protocolo de actuación en el que únicamente se recoge un reparto de competencias; no se dice nada sobre qué métodos utilizar para la retirada de nidos o el control de la población de avispa asiática. Eso provoca que cada comarca y cada municipios opte por las medidas que considera más apropiadas. “Habrá que esperar a que llegue a otras provincias” para que se actúe regionalmente.