Betania detecta nuevas formas de prostitución “más sutiles” e “invisibles”

El proyecto de las Adoratrices alerta del peligro de las redes sociales e internet para el comercio del sexo

Los contactos sexuales en la red son más invisibles, más clandestinos y más sutiles, y los engaños, también

El Ayuntamiento ha firmado sendos convenios de colaboración con Betania (49.000 euros) y Ain Karem (22.000)

Betania detecta nuevas formas de prostitución “más sutiles” e “invisibles” Lacalle ha firmado esta mañana los convenios con Betania y Ain Karem. PCR

El Proyecto Betania de la comunidad religiosa de las Adoratrices está detectando la aparición de nuevas formas de prostitución “más sutiles” y, sobre todo, más invisibilizantes. La crisis económica generó una mayor clandestinidad del comercio sexual, favoreciendo la proliferación de pisos en los que se ejercía la prostitución, en detrimento de los tradicionales clubes. Sin embargo, la clandestinidad ahora se está incrementando de la mano de nuevas vías de contactos sexuales, como los que ofrecen las redes sociales e internet.

Es la advertencia que realiza Consuelo Rojo, responsable del Proyecto Betania, quien recuerda que el carácter “incontrolable” de redes sociales e internet favorece el comercio sexual, y un carácter invisible. Los contactos son más sutiles, así que el engaño que ampara una explotación sexual, también. Ya no se trata solo de ejercer la prostitución en la clandestinidad, sino de una prostitución casi indetectable, y mucho más perniciosas para las mujeres. Por ese motivo, Rojo hace un llamamiento para que se vigile el uso de las redes sociales, sobre todo entre los jóvenes.

Rojo recuerda que dejar la prostitución no es fácil y, sobre todo, es una decisión personal con múltiples implicaciones

El Proyecto Betania ha firmado esta mañana un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Burgos, por el que el que recibirán 49.000 euros para desarrollar su trabajo de atención a mujeres que ejercen la prostitución. Rojo ha recordado que realizan acciones de contacto, en pisos y clubes, para informar a las mujeres sobre los servicios que prestan: asesoramiento en atención sanitaria, asesoramiento jurídico, orientación laboral, educación, vivienda…, están “para todo lo que necesiten”.

La segunda parte de la intervención es la prestación directa de ayuda, a demanda: realización de análisis médicos, búsqueda de empleo, ayuda jurídica, atención psicológica… Rojo ha recordado que salir de la prostitución es una tarea complicada, y depende siempre de una decisión de la mujer, ya que su situación suele derivar de una serie de condicionantes personales muy fuertes. Se trata de mujeres amenazadas, con deudas con sus proxenetas e, incluso, explotadas sexualmente por familiares, así que la decisión no es fácil.

Durante el pasado año, Betania contactó con 408 mujeres y atendió directamente a 96. El perfil sigue siendo el mismo de los últimos años. Mujeres extranjeras, incluidas aquellas que la ejercieron en los años ’90, consiguieron salir, y retornaron durante la crisis. Una crisis que también ha formado a muchas nacionales a meterse en prostitución. Consuelo Rojo ha insistido en que, lo más importante, es ayudar a las mujeres a que recuperen su autoestima y encuentren una salida personal y profesional basada en su independencia, emocional y económica.

Madres y embarazadas

Ain Karem atiende a mujeres embarazas y madres en situación de vulnerabilidad

El Ayuntamiento de Burgos ha firmado esta mañana también un convenio de colaboración con otra entidad social, en este caso Cáritas, para su casa de acogida Ain Karem, destinada a mujeres embarazadas o madres en situación de vulnerabilidad social y precariedad. En este caso, el proyecto recibirá 22.000 euros para financiar el funcionamiento de ese centro de acogida en el que se ayuda a las mujeres a reinsertarse en la sociedad, ofreciéndoles una oportunidad de futuro personal y profesional.

Jorge Simón, director de Cáritas, ha explicado que su trabajo apuesta más por la calidad que la cantidad, y se desarrolla mediante procesos muy “liberalizados”. El pasado año atendieron a 23 mujeres, con 24 niños, siendo el perfil del usuario es de una joven española. Se les ayuda a recuperar los lazos afectivos con sus familias, perdidos en muchos casos como consecuencia del embarazo, pero también a lograr una independencia económica que les permita reinsertarse en la sociedad.